PLANES DE SEGURIDAD
Raúl Yanko Montaño Vázquez
3. Si lo que manda en mucho es el instinto, ¿Tiene caso destinar tiempo y esfuerzo para elaborar un plan
de seguridad?
Definitivamente sí. Puede ser que lo elabores papel y pluma en mano, y de esas notas producto de un proceso
reflexivo desarrolles tu manual de medidas y procedimientos de seguridad para tu casa, por ejemplo.
Si tu forma de pensar es así de sistemática, es bienvenida y útil desde el momento que te permite organizar
mental y materialmente los pasos a seguir en caso de una emergencia. Cosas tan simples como tener bien
ubicados, a la mano y visibles los teléfonos de emergencia, el botiquín, el extintor, la salida de emergencia
y comunicar esta información y compartirla con los más cercanos, es un principio elemental para manejarse en
la vida con precaución.
Prevenir no es únicamente un asunto que ocurre en nuestras cabezas, si bien ahí se da en primer lugar, cuando
las ideas surgidas tras el análisis de los riesgos se ponen en blanco y negro, cobran forma tangible y son
más fáciles de difundir entre los probables afectados por esos riesgos presumibles.
No porque se trate de tu casa vas a dar un tratamiento radicalmente distinto al tema de seguridad. Puedes ver
tu hogar como una empresa, al final de cuentas es el centro de tu inversión patrimonial y requiere ser
asegurado para el presente y para el futuro de tu descendencia.